Ayer, 10 de enero, el Gobierno constituyó el Comité Asesor para la Estrategia de lucha contra la pobreza infantil.
La Estrategia es un marco general que tiene que permitir prevenir la pobreza de niños y adolescentes, detectarla de manera precoz, atenderla y trabajar una intervención coordinada y eficaz para erradicarla. El objetivo es romper el ciclo intergeneracional de pobreza y exclusión social que sufren los/las niños/as y adolescentes en Catalunya, a través de la mejora de las prestaciones y de la garantía de servicios esenciales clave y la promoción de la igualdad de oportunidades. Esto se hará mediante la adopción urgente de medidas clave en el corto plazo y un despliegue completo hasta el año 2030.
En este sentido, el Comité Asesor se encargará de identificar qué medidas hay que impulsar para reducir la pobreza infantil en Catalunya y proponerlas al Comité Interdepartamental, formado por representantes de ocho departamentos de la Generalitat.
El Comité Asesor está presidido por la secretaria de Infancia, Adolescencia y Juventud del Departamento de Derechos Sociales, Nuria Valls y Carol y está formado por siete representantes de entidades sociales (Save the Children, UNICEF, PINCAT, FEDAIA, Cruz Roja, “La Caixa” y Cáritas), tres expertos sobre pobreza infantil (Sara Ayllón Gatnau, Jose Antonio Noguera Ferrer y Eloi Mayordomo Martínez) y cinco observadores (Adjunta del Síndic de Greuges, Educación 360, IVÀLUA, Federación Catalana de Municipios y Asociación Catalana de Municipios).
En Catalunya, 436.400 niños, niñas y adolescentes (el 31,7% del total) están en una situación de riesgo de pobreza o exclusión social. Además, casi un tercio de estos niños y niñas de menos de 16 años viven en una situación de privación material grave, que les supone la falta de acceso a bienes, recursos y servicios básicos para mantener unas condiciones de vida dignas.
Según Save the Children, en Catalunya, el 38,9% de los niños/as de entre 6 y 12 años tienen exceso de peso y la obesidad y sobrepeso infantiles afectan en mayor medida a los niños que viven en hogares de rentas bajas, aumentando la probabilidad casi en un 50%. Además, según datos de la Encuesta de Condiciones de Vida, un 19,5% de los niños y niñas en Catalunya viven en hogares que no pueden mantener una temperatura adecuada en invierno.